"Fin de semana montero"

Pésimo finde montero el que nos ha deparado este último de noviembre. El sábado nos dábamos cita toda la plana de Monteros por España en Narros, provincia de Cuenca, para cazar los montes de este pueblo, esperando que los resultados se asemejaran a los ocurridos hace un año en estos mismos lares, cobrándose 37 gurarros.
Buen desayuno el preparado por catering Honrubia, con unas buenas migas, aderezadas por torreznos, salado, pimientos, uvas, chistorra, jamón frito y huevos fritos…

Se dieron las instrucciones de rigor y las armadas fueron saliendo ordenadamente. Desde el comienzo de la montería se apreciaba que había poco “bicho” en la mancha, puesto que los perros llevaban casi 1 hora sueltos y todavía no se había escuchado ninguna detonación. Hasta llegar a la zona baja de la mancha, cerca del viaducto del AVE, no levantaron las primeras piaras de cochinos, cargándose los lances en esa zona

 Al final y tras 58 detonaciones, se cobraron un total de 15 guarros de pequeño/mediano tamaño. El resultado particular del grupo fue que Lauren abatió dos gorrinetes y Alberto pinchó otro cochino mediano, que fue imposible localizar. Otro acompañante del grupo logró abatir 4 guarros, después de haber tenido 7 lances distintos.


 El resto, ni verlos. A nuestra llegada a Villarejo Sobrehuerta, el pueblo donde comimos, las mesas estaban preparadas en la plaza del pueblo, donde pudimos degustar unas costillas con patatas, un estupendo codillo de cerdo asado y un puding casero. Finalizamos la jornada, como siempre, en nuestra sede La Villara, viendo el partido del Madrid-Atleti.

 De todas formas, las ilusiones estaban en todo lo alto, puesto que al día siguiente nos dirigíamos a Zamora, al pinar de Villalpando, una mancha de pinar en medio de kilómetros de barbechos. Las expectativas eran muchas, ya que es una zona que lleva cuidándose 2 años. Se garantizaba un mínimo de entre 200-300 disparos en la noche de antes, entre todos los monteros. Salimos de Torrejón a eso de las 5.30, en una furgoneta agenciada por nuestro socio Angel, llevando incluso chofer. Roberto nos llevó al grupo y nos trajo, mientras nosotros echábamos una cabezadita. Desde Arévalo (Avila) comenzamos a entrar en una masa de niebla, que desgraciadamente, no nos abandonó en todo el día. La junta era en el pueblo de Villárdiga, presentándonos a primera hora de la mañana para dar cuenta de un fenomenal desayuno. Los puestos iban siendo asignados por orden de llegada… La niebla continuaba espesa y muy húmeda, a momentos gélida. A eso de las 10, todos los monteros estaban fuera del recinto, esperando que la niebla levantara. Pero la naturaleza es caprichosa y finalmente, tras muchos intentos, visitas a la mancha, la organización tuvo que suspender la montería sobre las 14.00 hrs. Es curioso como a unos 60 kilómetros de allí y volviendo para Madrid, comprobamos que el día era estupendo, soleado y de buena temperatura… La organización nos volverá a citar para otra ocasión, esperando que podamos acudir nuevamente.
Las ilusiones están bajo mínimos, la temporada va decayendo y los socios están muy bajos de moral. Hay mucha afición en todo el grupo, pero los resultados no acompañan a los esfuerzos que se están haciendo (económicos, horarios, viajes, favores familiares, laborales, etc.).
El sábado que viene, gran parte del grupo se dirige a Valdenarros (Soria) a cazar la cuarta montería del programa. En esta ocasión podremos tirar venados, ciervas y jabalí sin cupo. Veremos a ver qué tal se nos dá. Otros nos acercaremos a repetir "finde"montero, cazando en las tierras manchegas de San Lorenzo de Ctva.


Foto de grupo Pinar Villalpando