Primer día de temporada y primera montería de nuestro calendario. El Recuenco, afamada zona del Alto Tajo, fue el destino en esta ocasión. A las 7.30 como un reloj nos citamos los socios para comenzar la jornada... Sobre las 09.30 hrs llegábamos al Recuenco, pueblo con más de 7500 hectáreas de término, gestionado ahora por la orgánica Cuencaza.
Los primeros cafés de la mañana |
El sorteo, típico en este tipo de monterías, iba destinando suerte según llegada. La salida de las armadas fue tardía, llegando las traviesas al monte sobre las 12.30. La suelta comenzaría sobre las 13.00 hrs.
Dentro del grupo, 5 puestos (Tomás, Alberto, Pablo, Josito y Juanma) les tocó en la misma armada, Fernando y Rubén, nuestro nuevo socio en otra traviesa, y el resto repartido por otras traviesas.
Las primeras detonaciones no tardaron en hacerse escuchar, incluso antes de montar todas las armadas. El día era caluroso y los perros comenzaron la jornada muy despacio. La montería avanzaba y el tiroteo se incrementó sobre las 14.30 cuando las rehalas llegaron a lo más profundo de la mancha... La montería se dilató hasta las 16.00 hrs., siendo el tiroteo bastante repartido por toda la zona.
Uno de los puestos de los socios |
Dentro de la asociación, socios como Fernando (con un venado bonito y 6 guarros fallados), Mariano y su hijo Javi (con un navajero cobrado y 2 venados fallados), Andrés (con un motorista abatido), Rubén (que se estrenó con una gran guarra), Clemente (un venado fallado), Josito (una gama abatida) y Basi (con otra hembra de gamo abatida) fueron los más afortunados. El resto no pudieron estrenarse en este primer día.
Ya en la junta de carnes, con unas judías y una buena carne guisada, estuvimos esperando a que las reses fueran llegando al pueblo. Cuestión que se dilató más de la cuenta, debido a la distancia entre el monte y el pueblo y la gran extensión monteada. Sobre las 18.00 hrs., en el pueblo se contabilizaban 1 venado muy bueno, 21 guarros, de los cuáles no había ninguna boca reseñable y sí unos cuántos "piojos" nacidos sobre septiembre, 1 gamo macho y unas cuántas hembras. Ya en la salida del pueblo, nos cruzamos con un remolque que llevaba el resto de cervuno y algunos guarros más, por lo que el resultado definitivo se aproximaba a las 50 reses.
Tapete inicial |
Mariano y su hijo con el navajero cobrado por el segundo |
El mejor venado de la montería |
Suerte dispar entre los socios, aunque en líneas generales podemos calificar la montería de entretenida y muy aceptable, con un resultado acorde a las expectativas, aunque como siempre, la suerte va por barrios y en esto de la caza, más.
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